El caballo bereber es una raza de caballo existente en Barbária (Magreb) desde hace siglos. Sus orígenes son discutidos, pero sus características actuales se remontan a la época de la conquista islámica. Como caballo de guerra ha merecido los elogios de muchos especialistas, demostrando así sus cualidades hasta los años 50 del siglo XX.

Caballo Bereber

En cuanto a su velocidad comparada con la de los caballos árabes, no existen muchos datos; sólo un testimonio significativo de Ferdinand de Lesseps.

Historia del Caballo Bereber

El caballo bereber actual se definió como raza y como tipo en una zona geográfica determinada, siendo esta el norte de África hace más de doscientos años. Un rápido repaso histórico sobre esta área permite sugerir algunos rasgos de esta formación.

Época cartaginesa, Caballo Bereber

Cuando los fenicios fundaron la colonia de Cartago (650 aC) ya habían caballos en la región: los caballos númidas. Probablemente, esta base de caballos indígenas fue predominante numéricamente en el conjunto de caballos cartagineses. También es probable que hubiera importaciones significativas de caballos de la Península Ibérica y desde Fenicia, sin descartar otras aportaciones.

Ciudades de Barca y Cirene, Caballo Bereber

En el año 631 a.C, se fundó la ciudad griega de Cirene y en el 554 a.C. la ciudad de Barca por parte de unos ciudadanos cirenencs disidentes, esta segunda ciudad pronto se la caracterizó por la cría de caballos. Como colonia griega que era, podía participar en las Olimpiadas y lo hizo varias veces con victorias importantes, es así como la fama de sus caballos perduró hasta la época de la dominación árabe.

También Cirene fue famosa por sus caballos; para la época de Arcesilau IV, la cuadriga del rey obtuvo la victoria en los juegos Pitis en 462 a.C, con caballos de aquella tierra, para el momento el poeta Píndaro cantó aquella victoria (Pítiques, IV y V).

Con la denominación de caballos libios, es posible encontrar otras referencias: Herodoto, Estrabón, Pausanias. Y un ganador de los juegos Olímpicos (con cuadrigas y caballos «libios»): Theocrest de Cirene.

Época romana, Caballo Bereber

Las invasiones romanas significaron la importación de caballos desde Roma, Hispania y otras regiones. Pero el núcleo de la caballada continuó siendo cartaginés y númida hasta la conquista y destrucción de Cartago por parte de los romanos. Una vez repoblada Cartago como ciudad romana, hay pruebas numerosas de cría local de caballos para el circo con importante infusión de caballos hispánicos.

En el año 211 dC el poema dedicado a la caza, «Cinegética», de Oppis y dedicado al emperador Caracalla, habla de los caballos más adecuados para cazar. Entre los mejores, describe los mauritanos y los libios.

Invasión de los vándalos, Caballo Bereber

Desde el punto de vista del caballo en general y del caballo bereber en particular, es importante considerar el origen de los vándalos (y el de sus caballos), su número, su recorrido hasta su invasión al norte de África y su permanencia en el sitio. El croquis permite visualizar un poco los detalles expuestos.

En un momento de su historia, los vándalos estaban asentados en la ribera del mar Negro (siglo I d.C). Más tarde (año 429 d.C), el rey Genserico pasó desde la Península Ibérica hacia el norte de África con un ejército de 80.000 guerreros, en gran parte con sus caballos. Cualquier especulación sobre el tipo de caballos que tenían los vándalos en aquel ejército carecería de referencias documentadas. Por lógica, parece que una gran parte de la caballería vándala debería basarse en caballos semejantes a los de los sármatas, los alanos o de los hunos.

Caballos que habrían adquirido en su período de residencia cerca del mar Negro y que pese a tener un aspecto rudimentario, resultaban inmejorables en las guerras. Una vez victoriosos y dueños del territorio, sus caballos se habrían cruzado con los caballos númidas, mucho más refinados y numerosos.

Los documentos sobre aquella época son contradictorios. Algunos consideran los vándalos como simples bárbaros destructores de monumentos romanos. Otras fuentes hablan de sus preferencias sofisticadas (como el palacio de Genserico con jardines incomparables, según testimonio de Procopio, secretario de Belisario.) Otro testigo habla del circo de Cartago, con una fuente decorativa y utilitaria donde podían abrevar a los caballos que competían. Una medida del lujo de aquellos vándalos puede deducirse de algunos mosaicos conservados.

Invasión bizantina, Caballo Bereber

La expedición militar bizantina desembarcó en 533 en Leptis Magna. La caballería del general Belisario constaba de 5.000 jinetes. Los caballos eran griegos, la mayoría de Tracia, pero había 500 caballos hunos y 400 caballos hérulos.

La ocupación de Cartago se prolongo hasta el año 630, cuando la ciudad cayó en manos musulmanas.

Invasión islámica, Caballo Bereber

La conquista islámica del norte de África (que muy groseramente puede datarse alrededor de los años 630 a 698) es difícil de resumir. Por un lado, conllevó la apropiación de territorios costeros bajo dominio bizantino (con los caballos correspondientes) y por otro, a la derrota y dominación de las tribus bereberes del interior (también con los caballos respectivos).

Desde el punto de vista del caballo y a falta de referencias válidas, hay que prescindir de especulaciones e ir directamente a las consecuencias posteriores. Según el tratado Nacer de Abú Bekr ibn Bedr (Abou Bekr ibn Bedr, 1333) había 10 razas de caballos. La sexta (barka, de la ciudad de Barka) y novena raza (marrabi o magrebí) tienen relación con el caballo bereber. De acuerdo con el mismo autor, había una subraza, Heikal, dentro de los caballos de Barka. De cuerpo poderoso, extremidades grandes, pezuñas grandes y (en francés) cuatro reinas, expresión equivalente quizás a ‘grupa partida’.

Relación equina entre Al-Andalus y Barbaria, Caballo Bereber

Existe cierta relación entre el caballo bereber y los caballos andaluces en general, el caballo español de Felipe II, el caballo P.R.E. ( ‘Pura raza española’), los caballos napolitanos, los caballos lippizzans, los mustangs y los caballos criollos americanos y otros similares, se explica de forma muy diferente según los autores. Hay dos versiones que son casi opuestas.

Primeramente, Bogros y otros dicen que el caballo bereber es el origen de todos. Que los caballos indicados serían, fundamentalmente caballos berberiscos o con una influencia berberisca predominante. Esta idea dio lugar al término del caballo Spanish Barb.

La segunda versión es mucho menos extendida y aceptada, esta considera que la influencia del caballo bereber en los caballos ibéricos provenientes de la zona de Andalucía no fue significativa . Esta teoría considera ridícula la expresión Spanish Barb.

Probablemente, la realidad se encuentra entre las dos teorías. Existe documentación que comprueba que en épocas prehistóricas y antes de la fundación de las colonias griegas y fenicias, los caballos que se encontraban en el sur de la Península Ibérica y los caballos del norte de África estaban muy emparentados. Desde entonces hasta los tiempos de la invasión musulmana en el sur de Europa, hubo un importante traslado de caballos en ambos sentidos. Desde Andalucía hacia África y desde África hacia Andalucía .

Durante la ocupación musulmana, fueron relativamente escasas las aportaciones que exponen la travesía de caballos que cruzan el estrecho de Gibraltar hacia el norte y hacia el sur, pero significativas al momento de ilustrar el paso. En este sentido se puede afirmar que, en cuando a cantidad los caballos andaluces y los caballos berberiscos se mantuvieron independientes, con aportaciones puntuales de cierta importancia.

Formación de la raza actual del Caballo Bereber

Cuando los árabes conquistaron el norte de África, la cría de caballos ya estaba en suma medida desarrollada, ante ello recibió la bendición de la nueva religión lo que significó un incentivo para ellos. Además la llegada de caballos árabes de pura raza fue un aspecto importante, no por su influencia directa, pero sí por la aparición de caballos mezclados araboberbers. En el Magreb, conviven desde entonces tres castas de caballos: los bereberes tradicionales, los araboberbers y los de pura raza árabe (caballo árabe).

El estilo de vida tradicional de las tribus del interior permitió conservar las cualidades más útiles de un caballo de guerra (resistencia y rusticidad) sin perder velocidad, arranque o agilidad. Esencialmente, los mejores caballos berberiscos del siglo octavo eran muy parecidos a los que después elogiado el general Daumas y el coronel Denis Bogros. En las obras del general Daumas (especialmente en Las chevaux du Sahara, que incluye aportaciones capitales del emir Abd el Kader sobre el tema), se explican la la forma de cría y las costumbres de los bereberes.

Resumen y conclusiones del Caballo Bereber

En el norte de África se dio el hecho de que a partir de caballos de razas diferentes se  produjo el caballo bereber «clásico», aún existente en gran cantidad hasta 1950. Luego de esta fecha las cifras de caballos berberiscos puros fueron menguando hasta rozar el peligro de extinción. En 1987, se fundó la Organisation Mondiale du Cheval Barbe (OMCB) en Argelia, con el fin de preservar la raza.

Características  del Caballo Bereber

Características físicas del Caballo Bereber

El caballo bereber actual puede tener alturas variables. Es más alto y robusto en el este que en el oeste. Las características físicas son las siguientes:

• Proporciones: caballo «cuadrado», tan alto como largo.
• Perímetro de canela: mínimo 18 cm.
• Altura: 1,45 a 1,60 m.
• Cuerpo: corto y fino.
• Peso: 400-550 kg.
• Tipo: mediolíneo.
• Pelajes frecuentes: negro, castaño, alazán, tordo.
• Cola y crin: espesas y pobladas, a raíz de la cola baja.
• Grupa: inclinada.
• Cabeza: estrecho, con perfil convexo o ligeramente curvado.
• Narinas: poco destacados.
• Orejas: derechas y más bien cortas.
• Extremidades: sólidas y bien musculadas; relativamente delgadas, pero fuertes.
• Ojos: en forma de almendra; arcos superciliares muy poco destacados.
• Cuello: grueso y musculado, curvado en cuello de cisne.
• Uñas: pequeñas y muy duras.
• Los caballos berberiscos, generalmente, sólo tienen 5 vértebras lumbares, como los caballos árabes de pura raza.

Carácter y aptitudes del Caballo Bereber

El caballo bereber es dócil y rústico, este último elemento es expresado en el buen sentido pues significa que no es delicado ni débil, pero tampoco es tosco o mal acabado. Es polivalente: gran velocidad en distancias cortas, velocidad importante en distancias medias y posee una gran resistencia en lo que a trayectos largos se refiere. Es un excelente saltador en relación a su talla, su carácter es tranquilo, equilibrado y valiente. Parece perezoso pero con su jinete demuestra una fogosidad impetuosa. Es fácil de adiestrar y muestra una resistencia insuperable ante el frío, calor, sed, hambre … No parece cansado pese a que soporta las condiciones más difíciles.

En función de sus capacidades y prestaciones, representa un coste de mantenimiento mínimo y su carácter es tranquilo, el caballo bereber es fácilmente comparable con otras razas quizás más difundidas. Si el proyecto de mantenimiento y promoción de la raza alcanza un número importante de ejemplares, el caballo berberisco debería tener una buena expansión y desempeñar un papel destacado en la equitación de ocio.