Pottoka (en euskera pequeño caballo) es el nombre con el que se conoce una raza de caballo de pequeña envergadura o pony, que habitaron desde el Paleolítico, y casi sin cambios hasta la actualidad, los territorios montañosos de la Cordillera Cantábrica de la península Ibérica y los Pirineos occidentales en ambas vertientes.

Caballo Pottoka

Se distinguen al menos seis subtipos en este grupo cántabro-pirenaico: la Garrana de Portugal, el Caballo de pura raza gallega de Galicia, el asturcón de Asturias, el Caballo Monchina de Cantabria, el Caballo losino del norte de Burgos y la pottoka que se conserva en áreas del País Vasco, donde es especialmente criada.

Historia del Caballo Pottoka

Ya en cuevas prehistóricas, como las de Santimamiñe de Vizcaya o las de Ekain de Guipúzcoa, aparecen representados los primeros équidos los que se tiene constancia.

Hábitat y comportamiento del Caballo Pottoka

Viven desde la antigüedad agrupados en manadas salvajes, que se pueden contemplar en cualquier ladera de la montaña vasca, organizados en una jerarquía en la que al frente de la misma se sitúa la yegua Alfa, junto con el semental.

Esta raza, por su antigüedad y buen estado de conservación, ha sido elegida como la más recomendada para reintroducir (Rewilding) el caballo salvaje europeo, por ejemplo en zonas de los Pirineos y N.E peninsular.

Características del Caballo Pottoka

Es un pony de aceptable conformación general y que puede definirse como un animal elipomètric, subcóncavo y subrevilini o mediolíneo. La altura media oscila entre los 1,25 m de las hembras y los 1,23 metros del machos. El perfil de la cabeza varía del recto al subcóncavo, siendo en general una cabeza armónico, piramidal y proporcionado. La cara es recta, con un tupé característico. Las capas pueden ser negra o castaña muy oscura.

Los Pottok de pura raza son de capa totalmente negra y las manchas de otro color que no sea el negro o el castaño ya que estas manchas serían síntoma de mestizaje. Son animales a los que se puede definir como équidos resistentes, rápidos, rústicos, fuertes, dóciles y aptos salir a cazar, montarlos en paseos y competir en saltos de obstáculos. Han sido precisamente estas últimas funciones, las que están ayudando a que esta raza no desaparezca, a pesar de encontrarse en peligro de extinción. Sus características están mejor explicadas en la web de «Zaldibia Aralar pottokas Elkartea» y en la web de «EPOFE, Federación de criadores de la raza pottoka de Euskadi».

Uso del pottoka como ayudante para el trabajo

En el pasado se les ha utilizado como tractores de los vagones en las minas, para las tareas de cultivo y tiro en los caseríos, en la limpieza de Argoma y los pastos de las montañas, en las eras para la cosecha de cereales y como carne para las carnicerías.
Las diputaciones forales de Vizcaya y Guipúzcoa disponen de dos centros de cría y multiplicación de esta raza. En el País Vasco del Norte está más extendida su crianza, y en Navarra ahora se está empezando a trabajar a nivel particular para recuperarla y promocionarla.